Adios poeta... transmutación

Cuando empecé a escribir este blog hace 4 años aproximadamente era una persona tan diferente a la que soy ahora, tan inmaduro, soberbio, simplemente, otra persona, un niño. Pero ya han pasado casi cuatro años y este blog ha sufrido cambios estéticos e internos bastante radicales, y es que en un principio era un blog de diseño, pero cuando me tropecé con la poesía, todo cambio, y por que no decirlo, en cada etapa, en cada poema hay una dama, aunque claro, solo una diosa coronada, nadie te quitará ese título. Pero amigos, este es el principio del fin, abriré otro blog donde me dedicaré a escribir solo poemas, ensayos, pensamientos, quizás algún cuento, mientras tanto este blog solo quedará para el recuerdo y por si alguien encuentra letras o cuentos de consuelos.
Adios poeta, nos veremos en otro infierno.

En la playa

En la playa se quedaron las gotas de la felicidad, de las tardes apasionadas y calmadas, de los te amo infinitos y de los infinitos soles en tu mirada. Alla en la playa, donde algún día regresarás, encontrarás, quizás, mi viejo aroma, mi vieja presencia y mis viejas palabras, allá, en la playa, encontrarás el verdadero olvido del tiempo.

¿Dónde?

Vos que recorres mi cuerpo
con tu encantada melodía sorda,
muda e inerte,
que no deja de existir en el brillo de la noche,
yo me pregunto, ahora,
más que nunca,
¿dónde estás? ¿dónde te has quedado?
¿y si volverás?
¿y si me has amado?.

Primera carta rechazada.

Hijo, vos que formas lo más importante para mi, quiero decirte que te amo, que lo que más espero es tu nacimiento para poder tocar tus manos, tus pies, y que me hagas llorar por la emoción. Deseo verte crecer y enseñarte el verdadero valor de la vida, la felicidad y la sencillez y la humanidad que nos caracteriza. Esperaré para jugar fútbol y acompañarte en cada etapa de tu vida, la cual cuidaré pues es lo más preciado que tengo. Y vos, que reúnes lo mejor de mi y de tu madre, llegarás lejos, sé que harás cosas grandes, y que cambiarás nuestras vidas para mejor. Sin más que decir te doy las más eternas bendiciones.

Te asomas por la ventana de mi memoria
impidiéndome volar,
haciendo que choque con tus recuerdos
y que vuelva
a perderme en el tiempo.