martes, 24 de noviembre de 2009

Cuenca

Aunque fue hace una semana que regrese de Cuenca aquí les traigo algunas fotos que saque mientras me paseaba por aquella hermosa ciudad. Debo decir que la gente de Cuenca es una gente muy amable, acogedora.

Por otra parte la ciudad es muy limpia y siempre ves a los recogedores de basura limpiando lo que ya está limpio.

Bueno, no tengo mucho que decir, la mayoría del tiempo pasaba en la Universidad del Azuay donde se realizó las conferencias y talleres para celebrar de cierta forma el 25avo año de diseño general en el Ecuador.

Definitivamente regresaré, y más aún cuando encontramos con Jorge y Andrés un par de bares a nuestro estilo, de rockeros, rastas y con música buena ya que la toda la semana nos toco aguantar el reggaetón y todos sus géneros que si no fueron alentadores solo sirvieron para que me aprenda la letra.






miércoles, 4 de noviembre de 2009

Vestido Negro



En esta noche mis letras son negras, como tu vestido negro. Las escribo pensando en negro porque pienso en la figura perfecta de tu cuerpo con tu vestido negro.

En esta noche, tu vestido es de gala, le honran a mis mentiras. Ríes, te sonrojas y con esos ojos infinitos me das un beso sin mirarme y con tu perfume de en sueño me invitas a soñar a tu lado. Te puedo ver tras tu velo negro, te descifro y solo quedo fascinado. Me encuentro sumergido en una explosión astral de hermosura infinita y esta vez solo tus cabellos te cubren, dejaste de vestir de negro.

Aun con tu sonrisa, me invades en un torbellino de locura, me tientas a tocar tus besos y a quererte para mis adentros y aunque no me creas, te quiero.

martes, 3 de noviembre de 2009

Hoy tampoco encuentro inspiración...



Hoy tampoco encuentro inspiración y, aunque tú me inspiras, me siento atado. Pero te miro, te desvaneces por un segundo y regresas. Contigo traes una música nueva, un sabor desconocido y una mirada autentica.

Te quitas la máscara, quedas más bella. En la oscuridad del sueño resaltas tu inocencia inmadura. Tus largos cabellos me trazan un camino a tu cuerpo, llego, no tan lejos.

El lunar escondido que tienes se llena de besos igual que el resto de tu cuerpo. Eres hermosa y lo sabes. Me cuentas una historia con los dedos y dibujas las estrellas en mi pecho, eres única y lo sabes.

Ya no hay nada, solo queda un veremos, una oportunidad suelta.