
Ella: Tengo miedo
Él: ¿de qué tienes miedo?
Ella: de enamorarme de ti, de depender de ti y que cuando sientas mi total amor hacia ti me dejes por alguien más.
Él: si hubiera querido dejarte por alguien más lo hubiera hecho tiempo atrás y no estaría aquí, de pie y con mis ojos posados en tus ojos, y no expandiría todo mi corazón para decir que solo te quiero a ti.
Ella: eso dices ahora, los hombres no tienen sentimientos.
Él: los tengo y tú los conoces.
Ella: aun así tengo miedo de enamorarme y aferrarme a ti, nuestra despedida es muy pronto y es mejor así. Tengo miedo.
Él: no tengas miedo, no de mí por lo menos, porque yo estoy aquí para ti. Quiero estar contigo, besarte, abrazarte y no soltarte. Quiero ver esa sonrisa infinita y esas mejillas estrelladas. No soy tonto, no sacrificaría eso por una aventura. Te quiero y este tiempo contigo ha sido algo único y mágico. Amor mío, mi diosa coronada, despierta y no tengas miedo.