domingo, 11 de abril de 2010

Mírala


Mírala,
esta hermosa.
Su pecho es negro,
sus piernas blancas
y sus pies
flotan,
se mueven,
se pierden,
bailan.

Es melodiosa,
rítmica,
sensual,
y su rostro plagado de estrellas
brilla e ilumina.
¡Mírala! ¡Está hermosa!

Esta distraída,
alejada,
se ha volado a otro mundo,
en un mundo solo,
donde aún es hermosa.
Mírala, se ve hermosa,
mientras esta sola.